Día 1
Tepotzotlán – Ciudad de México

Desayuno en el hotel. Visita al Museo del Virreinato. En este recinto museográfico, sede del antiguo Colegio de San Francisco Javier, se exhibe, difunde se investiga sobre la época del Virreinato en la Nueva España. Su vasto legado conjuga las mezclas de castas nacidas en el Nuevo Mundo. Sobre sale su invaluable colección de marfiles de los cuales los Cristos gozan de gran estima y admiración entre sus visitantes. Todas estas piezas llegaron a nuestras tierras venidas del Oriente en el Galeón de Manila.

El edificio conserva aún espacios propios de la época: su cocina, la botica, la cava, el torno y su capilla doméstica. Es un espacio que retrata magníficamente el México de la Colonia, a través de sus talleres conventuales, monjas coronadas, sus artes y oficios y otros muchos temas relacionados con la conquista espiritual de la Nueva España. Además, se podrá también admirar en este recinto, piezas estofadas y policromadas, tallas de diversas técnicas y manufacturas, así como ornamentos religiosos ricamente decorados y metales preciosos, especialmente en plata. De gran valor las pinturas de gran formato de los afamados Miguel de Cabrera, Cristóbal de Villalpando, Juan Correa y Martín de Vos, entre otros.

Al concluir esta visita nos dirigiremos a Cuautitlán, cuna del indio santo Juan Diego, para comenzar en este sitio la “Ruta de San Juan Diego al encuentro de la Virgen de Guadalupe”, corazón de todas nuestras actividades. En este lugar, en el Santuario diocesano de la Siempre Virgen María, conocido como la Casa de Juan Diego, visitaremos el lugar del nacimiento de Juan Diego y donde éste paso sus primeros años de vida según lo atestigua una sólida tradición. Los vestigios arqueológicos de este sitio nos permitirán comprender el entorno social y religioso del indio macehual que tuvo la dicha y el privilegio de ver a la Dulce Señora de Cielo Santa María de Guadalupe en el cerro del Tepeyac en el año de 1531.

Comida en Cuautitlán.

Después de la comida nos trasladaremos a la Basílica de Guadalupe, corazón cristiano de México y América, cuna mestiza de la fe y signo inequívoco de elección divina.

En este conjunto sagrado, tendremos el privilegio de contemplar con nuestros propios ojos, el Sagrado Original de Santa María de Guadalupe, es decir, la tilma burda y rala, donde se quedó milagrosamente estampada la bendita imagen de la Madre de Dios, quien vino a estas tierras cuando recién se abría delante de nuestros pueblos la corola de la fe y presidió Junto al humilde Juan Diego, el Pentecostés de América. 

En este singular recinto participaremos de la Santa Misa. Asimismo, conoceremos el conjunto arquitectónico que conforma este maravilloso lugar: Capilla del Cerrito, Templo de Capuchinas, Capilla del Pocito, Antigua Basílica, hoy templo expiatorio de Cristo Rey, el Jardín de la Ofrenda, el Carrillón, el Atrio de América y la Plaza Mariana entre otros.

El Santuario del Tepeyac, del que la sagrada imagen de la Virgen María de Guadalupe es el corazón, ya desde el Siglo XVI ha sido meta constante de peregrinos, procedentes no sólo de la Nación Mexicana sino de todo el Continente Americano. Aquí han fortalecido su fe las generaciones sucesivas, encontrando la fuerza necesaria para dar testimonio de la fe en el Evangelio de Jesucristo y mantenerse fiel a ella.

También hoy son innumerables los devotos de la Madre y Reina Guadalupana, de cualquier edad, profesión y clase social, que acuden cada año, unidos por el mismo amor a la Virgen y la conciencia de pertenecer a la Iglesia de Cristo.

Desde entonces, Guadalupe, es el acontecimiento más noble de la nación mexicana. Ella es el orgullo de nuestra raza. Hemos nacido al abrigo de su materno amor.

Saber más de la Santísima Virgen de Guadalupe

Día 2
Santuario de la Quinta Aparición – Teotihuacán – Tlatelolco

Después del desayuno nos dirigiremos a Tulpetlac en el estado de México, para conocer el Santuario de la Quinta aparición, antigua casa de Juan Bernardino, el tío de Juan Diego, lugar donde la Virgen María se apareció al moribundo Juan Bernardino, lo sanó y le reveló su nombre. Para conmemorar dicho evento, en este sitio, se levantó una antigua ermita, misma donde hoy se levanta el Santuario de la Quinta Aparición.

Desde hace mucho tiempo, cada día doce de mes, acuden a este templo muchísimos enfermos en busca de salud, participando de los sacramentos de la Eucaristía y de la Unción de los Enfermos. Este templo perteneciente a la hoy diócesis de Ecatepec es atendido por sacerdotes religiosos de la Congregación de Operarios del Reino de Cristo, fundados por el R. P. Enrique Amezcua, cuyos restos mortales reposan en la entrada principal del templo.

En el retablo principal de este templo veremos un lienzo de gran formato donde se representa a la Virgen María de Guadalupe, de pie, junto al lecho mortal del anciano Juan Bernardino, en el momento preciso en que lo sana de una enfermedad mortal. La construcción de este templo se debe a un arquitecto de origen libanes. En este lugar tendremos la Eucaristía y si el tiempo lo permite descenderemos a la parte inferior del presbiterio donde se encuentra una fuente de agua donde según una sólida tradición estuvo la casa del tío de Juan Diego.

Terminada la visita nos dirigiremos a Teotihuacán, “el lugar donde los hombres se convierten en dioses”. Conoceremos su sorprendente complejo arqueológico en el que destacan sus majestuosas pirámides del Sol y la Luna. Conoceremos el Palacio de Quetzalpapálotl -de las mariposas- vivienda de la clase sacerdotal de sus antiguos pobladores, el mural del Jaguar que a pesar del paso del tiempo conserva parte de su colorido original, la Calzada de los Muertos y sus patios hundidos, así como el templo de Quetzalcóatl.

Comida típica en la zona arqueológica. Al terminar nos dirigiremos a Tlatelolco en la ciudad de México.

Llegada a Tlatelolco. En este significativo complejo que alberga tres etapas representativas del México actual conoceremos el templo colonial de Santiago Apóstol, levantado sobre los vestigios prehispánicos de uno de los centros ceremoniales más representativos del México prehispánico, escenario de la caída de México Tenochtitlán y sede del mercado más grande e importante de toda América antes de la Colonia.

Este monumental ex convento franciscano fue proyectado por los padres Juan Bautista y Torquemada en 1609 con manufactura indígena. Al interior del templo veremos la pintura mural de San Cristóbal, quien es representado como el portador de la religión católica en el Nuevo Mundo, en las pechinas del templo, las esculturas de barro estucadas y pintadas de los evangelistas. Y de manera especial pondremos especial atención en la pila bautismal en la cual se cree recibió el agua del bautismo el Cuauhtlatoatzin, tomando el nombre cristiano de Juan Diego, de manos fray Toribio de Benavente, Motolinia, en el año 1524.

Según una constante tradición a este sitio acudía Juan Diego a pasar lista, a participar de la doctrina cristiana y oír misa. Juan Diego fue canonizado por el Papa Juan Pablo II en su V Visita Pastoral a México el 31 de junio de 2002. 

Día 3
Ciudad de México (Centro Histórico)  

Visita al antiguo Palacio del Arzobispado hoy Museo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Este edificio está erigido sobre el basamento de la pirámide de Tezcatlipoca, dios de los guerreros y señor del inframundo. En este lugar vivió el primer obispo de la Nueva España fray Juan de Zumárraga, quien en vida donó esta propiedad para un hospital, la que luego en la Independencia se convirtió en cárcel, después en cuartel de las tropas francesas hasta pasar a ser la Contaduría Mayor de Hacienda y la imprenta del Gobierno de la ciudad, hasta albergar la dependencia que hoy la ocupa.

En este lugar, es donde Juan Diego se entrevista varias veces con el obispo Zumárraga, hasta el momento mismo de la milagrosa estampación de la Virgen de Guadalupe en la tilma del indiecito, ante la mirada atónita del prelado franciscano y otras personas allí presentes. Juan Diego, al desplegar su tilma y al caer las rosas -pruebas del milagro- queda milagrosamente grabada la dulcísima imagen de santa María de Guadalupe como hoy la vemos en su Casita del Tepeyac.

Terminaremos la “Ruta de San Juan Diego y su encuentro con la Virgen” en la Catedral Primada de México, último lugar donde estuvo colocado el Sagrado Original de la Virgen de Guadalupe antes de ser llevada solemnemente en procesión a la primera ermita que le mandara construir el obispo Zumárraga en el Tepeyac. La imagen de la Virgen santísima estuvo expuesta en lo que hoy es la sacristía, en este sitio está colocada una placa que recuerda este hecho.

La visita a la catedral nos dará la oportunidad de visitar la tumba de Zumárraga, el obispo depositario del portento guadalupano, ubicada en el sótano de la catedral, así como la de otros obispos de esta metrópoli. Visitaremos: el altar de los Reyes, el altar del Perdón, la capilla de las Reliquias, sus demás altares laterales, su Coro, el monumental órgano y la parte más antigua del complejo arquitectónico: su sacristía. En esta última parte veremos pinturas de gran formato, esculturas, muebles y ornamentos litúrgicos.

Comida.

Templo Mayor y Palacio Nacional

La ciudad de México y su centro histórico ofrecen como pocas ciudades del mundo una belleza excepcional. El corazón de la ciudad atesora dentro de sus muros la antigua y majestuosa México – Tenochtitlán, representada dignamente en su Templo Mayor, centro ceremonial mexica, cuya cosmogonía se ve simbolizada en su pirámide dual, su tzompantli, mitos y tradiciones. Aquí conoceremos la milenaria y rica cultura del pueblo sol, que, venido del lejano Aztlán, se estableció en el punto señalado por Huitzilopochtli para fundar la capital de su imperio.

En el cubo de la escalera principal del patio central del Palacio Nacional, el muralista mexicano Diego Rivera, plasmó el andar del pueblo mexicano a través de la pintura. Logró Rivera con extraordinaria sensibilidad “retratar” el alma del pueblo de México, desde la época antes de la colonia hasta el México moderno. En estos murales vemos el México bullicioso, colorista y encantador que percibía Diego Rivera.

En la Plaza de la Constitución, hoy escenario de emociones, sentimientos y protestas del pueblo mexicano, se levantan palacios y edificios que abrigan más de setecientos años de historia. Es esta plaza sede de los poderes civiles y religiosos del país, espacio de eventos políticos, culturales, artísticos y sociales de la sociedad mexicana.

Día 4

Regreso a casa, o continuar con nuestra peregrinación con rumbo al estado de Puebla.